Procedimiento
Mejora zonas tanto de la cara como del resto del cuerpo, utilizando la propia grasa extraída de otras zonas del cuerpo.
La transferencia de grasa, también llamado injerto de grasa, inyecciones de grasa o lipofilling, es un procedimiento que utiliza la propia grasa de una persona para rellenar irregularidades y surcos. Así como dar volúmenes a zonas del cuerpo que así lo requieran y es también usado para un rejuvenecimiento de cara, cuello, escote y manos principalmente.
En sus variantes de Mini, Micro y Nano injertos de grasa.
La grasa necesaria se obtiene mediante una lipoescultura limitada a través de una o varias incisiones pequeñas, normalmente se extrae del abdomen o la parte interna del muslo. La grasa aspirada se procesa mediante centrifugación, filtración o lavado. Como resultado, se obtiene tejido graso líquido y puro, listo para la inyección en la zona deseada.
A continuación, se inyecta la grasa, cuando es necesario. La grasa se distribuye uniformemente en la zona, mediante la inyección de pequeñas cantidades en los tejidos, de tal manera que la grasa inyectada esté bien rodeada de tejido sano. Esto asegura que la grasa trasplantada permanezca en contacto con los tejidos circundantes que deben suministrar con oxígeno y nutrientes, para lograr su sobrevida y aceptación en su nuevo sitio.
Recomendado para las mejillas hundidas, la desaparición de la grasa de los pómulos, los surcos profundos que van desde la nariz hasta las comisuras de la boca, y en algunos casos, también las líneas entre el párpado inferior, la mejilla y aumento de labios.
Aproximadamente una hora o más, dependiendo de la extensión de las zonas a tratar.
Se utiliza anestesia local y sedación venosa para infiltrar tanto la zona donante como la zona a tratar.
Puede hacerse tanto con ingreso hospitalario como ambulatoriamente.
Reposo, uso de bloqueador solar, no asolearse por 3 meses y las demás indicaciones son de manera personalizada.